La mayor parte del tiempo, cuando hablamos de dolientes (personas en proceso de duelo) pensamos en adultos, pero los niños también pasan por ese proceso.
Normalmente, a nuestros niños, los queremos proteger tanto que realmente los mantenemos al margen de situaciones vitales (en sus vidas también) y en lugar de ayudarlos, como es nuestra intención, estamos retrasando su propio proceso de duelo (que obligatoriamente y por su salud emocional deberán pasar) y además contribuimos a que su confianza en nosotros disminuya (por que al fin y al cabo, con comentarios como «no pasa nada» cuando nos ven llorar, no ayudamos a que confien en nosotros).
En estos casos, y siempre teniendo en cuenta la situación del menor, es recomendable actuar según unos parámetros:
– Las malas noticias las dará una persona de mucha confianza para el niño, a ser posible uno de sus padres, o los dos. En un ambiente seguro para el menor, como puede ser el salón de su casa y con poca gente alrededor.
– Iniciaremos la conversación recordándole (si era conocedor de la situación) lo que estaba ocurriendo «recuerdas que el abuelito estaba muy malito y se lo habían llevado a curarlo…?».
– Decirles la verdad, adaptándola a la edad del niño: «el abuelito estaba muy muy muy enfermo y se ha muerto», en lugar de utilizar frases como «se ha dormido para siempre», «se ha ido de viaje».
– Mostrar sentimientos delante del niño: si tenemos ganas de llorar, lloramos. Si estamos tristes y nos pregunta, le decimos que estamos tristes. Así estaremos alentando a mostrar sentimientos con naturalidad y a que confíe en nosotros porque ve que no estamos «como siempre» y somos sinceros con él.
– Esperar a que el niño haga preguntas y le contestemos con la mayor naturalidad posible, animándolo a que pregunte sin miedo y se exprese.
Sobre todo PADRES DE ESOS NIÑOS A LOS QUE TENÉIS QUE DAR MALAS NOTICIAS: hemos de echar mano del sentido común, de la serenidad, del amor hacia nuestros hijos y la limitación que tenemos porque para esto, nadie nos prepara.
Pilar Solana Muñoz. Psicóloga Clínica.
Muchas gracias por tu consejo. Lo segui al pie de la letra y nos ha ayudado mucho ha pasar este trance de la vida todos juntos y con mucha naturalidad. No podria imaginar lo maduros que pueden llegar a ser los hijos en estos momentos.
Mil gracias
Me gustaMe gusta
Hola Rafa, me alegra saber que os ha servido de ayuda. Muchas gracias por vuestra confianza.
Un saludo afectuoso para vosotros y vuestros peques 🙄
Me gustaMe gusta